Tras la muerte del
estudiante del colegio Restrepo Millán el pasado 13 de marzo por robarle un
celular la comunidad educativa marchó exigiendo que se haga justicia y les solicito
a las autoridades locales más seguridad en el territorio.
Al concluir una mesa de trabajo con la alcaldesa local, Diana
Mabel Montoya, estudiantes, docentes, padres de familia, El comandante
operativo de la Policía Metropolitana de Bogotá, coronel Óscar pinzón y
otras autoridades del Distrito Capital. Pinzón anunció un plan de rutas
escolares seguras y un reforzamiento de la vigilancia motorizada en los
colegios de la localidad de Rafael Uribe Uribe, para garantizar la tranquilidad
de los estudiantes de la zona.
También se pondrá en marcha el Plan Padrino, un
programa diseñado por el comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá,
general Edgar Sánchez Morales, para que cada uno de los comandantes y
subcomandantes de las veinte estaciones locales se conviertan en enlaces de la
institución con los recortes de los establecimientos educativos.
La alcaldesa de Rafael Uribe Uribe, Diana Mabel
Montoya Reina, al deplorar los hechos en los que murió el estudiante del
Restrepo Millán, urgió al Gobierno Nacional para que revise y modifique el
Código de Infancia y Adolescencia (Ley 1098/2006) y la convierta en un
instrumento eficaz para combatir la delincuencia juvenil. Asimismo, la mandataria
pidió a la Fiscalía General de la Nación para que agilice las investigaciones y
la judicialización de las bandas de delincuentes, especialmente del
microtráfico, que actúan dentro y fuera de los colegios.
Por su parte la comunidad educativa le piden a la
administración local y a las autoridades que haya mayor seguridad y que la
muerte de su compañero no quede en la impunidad como muchos que han quedado en
el país.
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